miércoles, 20 de octubre de 2010

220.- Si yo.

Con esto nunca alcanza.

“¡Pura espuma!” le gritó ella con fuerza, casi con odio, mientras él la miraba sorprendido ante su reacción cuando la quiso saludar.
“te haces el ¡no sé! Te haces el vivo, decís cosas lindas, te miro como una idiota, provocas algo en mí, y cuando te veo te quedas en el molde, no me decís nada loco, nada lindo, nada suspirante… ¡pero me miras con esa sonrisa! ¿Qué te pasa, te lo preguntaste? ¡Ay me haces poner loca! ¿Por qué no me decís lo mismo?...”
Él la miraba extrañado, sentía un ardor en el pecho, no podía respirar muy bien, estaba ¿emocionado? Cómo definirlo, se había quedado sin palabras, no esperaba tal reacción.
“Besarte, ¿te parece? O agarrarte de la mano y llevarte a caminar por ahí ¿no es linda propuesta? Y mientras caminamos te voy diciendo todo lo que me haces sentir, por qué, desde cuándo, cómo… te digo todo, te lo recito si querés, no sé, no pensé que necesitaras algo así de mí… bah, nunca me habían pedido algo así”
Ella mantenía su cara de enojo, mirándolo fijo, con ira (una disimulada y fingida ira), él sonreía mirándola igual…

No importa lo que pase, ni yo lo sé…

Gracias por leer.

1 comentario:

Ais. dijo...

Pero se sabe muñaño! Como no voy a ir? Si esta a dos pasos! Ya fui en Abril y me quedé con ganitas de volver :) (cosas de la nostalgia vió?) si yo por poco casi nazco alla... Ya te contaré

Besos!